Hola amigos de la diversión, hoy vamos a ver algunos ejemplos de imagen corporativa en los que se utiliza la ilustración como recurso asociado. Vamos a ver cómo se potenciará notoriamente el mensaje, centrará el target y ayudará a comunicar. En fin, vamos a ver cómo se “hace marca” mediante ilustraciones.
Pero antes que nada, repasaremos qué significa cada cosa. Por un lado, vamos a entender una ilustración como componente gráfico que completa o realza un texto, aunque a mi me gusta pensar que no siempre es así, creo que en multitud de casos es el texto el que completa a la ilustración. Por otro lado, vamos a entender la imagen corporativa como la identidad visual corporativa, el componente gráfico de la marca. Puedes profundizar un poco en este post de mi colega José a.k.a. Mikiwaka, que escribe que da gusto.
Ilustración en imagen corporativa
Resulta que desde mediados del pasado siglo hasta hoy la ilustración publicitaria ha ido siendo cada vez más importante, ya que ha traído consigo elementos expresivos con los que llegar directamente al consumidor a través de la transmisión de emociones.
Al estar tan extendido, es de lo más común hoy en día encontrar buenas prácticas en clave de ilustración y diseño que acompañan a la imagen corporativa de una marca, a poco que investigas encuentras cosas maravillosas.
En este ejemplo, la ilustradora y directora de arte Kero ha realizado la imagen corporativa de la marca de cerveza Contromano, mediante la utilización de distintas ilustraciones diferencia cada uno de los productos. El aire, los colores, la expresividad de los trazos y de las manchas de color tiñen la marca y construye una imagen corporativa propia.
En el siguiente ejemplo el director creativo Lee June Hyeong, de la mano de Bae Soo Hyun en el diseño e ilustración, crean una imagen muy naïf, divertida y dinámica para la guardería Space Dot Kids. Ocurre exactamente lo mismo que en el diseño anterior.
Como vemos, un buen uso del feeling que transmite una buena ilustración produce un efecto detersorio sobre una marca, a la par que la tiñe de manera inconfundible.
El poder de la ilustración en la imagen corporativa o “El caso 1992”
A mi me pilló bastante joven, pero quien tenga cierta edad recordará el 1992 como el año culmen en cuanto a la imagen que ha ofrecido España hacia el resto del mundo, desde los tiempos del imperio en el que no se ponía el sol, claro está.
Es precisamente porque en ese año se celebraron dos eventazos a nivel mundial: la Expo en Sevilla y los Juegos Olímpicos en Barcelona. Ok, vamos a recordar los logos de estos dos eventos. La mayoría seguro que ha pensado en las queridísimas mascotas Curro y Cobi de los grandes Heinz Edelmann y Javier Mariscal respectivamente, aun siendo los logotipos muy reconocibles (y brutales para mi gusto), poca gente se acuerda de ellos.
Pues eso, Curro y Cobi son personajes muy simpáticos que hacen cosas con las que la gente se identifica. Es fantástico el punto hasta el que se pueden meter un pájaro psicodélico con patas de elefante y un perro punky rehabilitado en el imaginario popular. A esto me refiero cuando hablo del poder que puede llegar a tener la ilustración en una imagen corporativa.
Marcas trabajando con ilustraciones
Por esto, es perfectamente lógico que infinidad de marcas trabajen con ilustraciones para reenfocar su imagen, existen millones de ejemplos, voy a recopilar algunos que me han llamado últimamente la atención.
El bueno de Andy Rementer ha realizado ilustraciones multitud de marcas: Mtv, Komono o Asics entre otras.
Y por último, vamos a ver el caso de la cadena Flying Tiger, que ha cambiado su imagen corporativa (incluyendo su logotipo) en pos de humanizar la marca, de hacerla más manual. La encargada ha sido la conocida agencia Saffron. Entiendo perfectamente por qué lo han hecho, pero personalmente creo que cambiar el logotipo no era necesario, pienso que era muy reconocible y que no choca con un planteamiento de línea comunicativa que vire hacia lo manual y humano.
Paralelamente y reforzando este cambio, han abierto una línea de productos diseñados por artistas (muy cercanos a la ilustración) que me parece magnífica, porque cumple perfectamente con su cometido, que es teñirse de naïf. Hasta la fecha han colaborado con dos de mis artistas top: Misaki Kawai y David Shirgley, y, joder, esto me mola mucho.